Lupercalia es un antiguo festival de origen romano, que se celebraba anualmente el día ante diem XV Kalendas Martias, equivalente al 14 de febrero actual. Era una fiesta de fertilidad y liberación sexual, donde las normas sociales se suspendían temporalmente, y que derivó a través del tiempo en el Día de San Valentín actual. En este artículo conocemos sobre esta festividad y su vínculo con el Satanismo.
El dios Luperco
La palabra Lupercalia deriva del antiguo dios romano Luperco, cuyo nombre a su vez proviene del latín “lupus”, que significa “lobo”. La fiesta de la Lupercalia tenía sus propios sacerdotes llamados Luperci, «hermanos del lobo».
Luperco es un dios romano, reverenciado por los pastores como protector del ganado y de las bestias salvajes. Era también un dios de la fertilidad, que ayudaba a las mujeres a embarazarse.
En la mitología romana, los dioses a menudo tenían múltiples nombres y aspectos, reflejando sus diversos roles, atributos y las diferentes formas en que eran adorados. Otro nombre del dios Luperco, en la mitología romana, era Fauno. En la mitología griega, era el dios Pan, el dios astado que a su vez es identificado con Satán.
El lobo en la cultura romana
El lobo y en especial la loba, tenían especial importancia en la cultura romana. De acuerdo a la leyenda, los fundadores de Roma, Rómulo y Remo, habían sido abandonados de niños y fueron encontrados y amamantados por una loba.
El lobo era en general considerado un símbolo de poder y fuerza: los romanos se consideraban descendientes del dios de la guerra Marte, que era frecuentemente asociado con lobos. Los lobos era considerados mensajeros divinos, y ver uno era interpretado como un buen presagio. El festival de Lupercalia era una de las diferentes formas en las que se expresaba el culto a los lobos en la Antigua Roma.
El ritual de Lupercalia
En la cueva de Lupercal, se sacrificaba un perro y uno o más machos cabríos para simbolizar la sexualidad. Estos rituales eran llevados a cabo por los sacerdotes Luperci. Dos de ellos, estando desnudos, se untaban con la sangre de los cabríos mientras los demás Luperci reían. La sangre era luego limpiada con lana empapada en leche. Después, se cortaban tiras de la piel de las cabras sacrificadas para formar correas llamadas februa.
Desnudos o semidesnudos, los Luperci corrían por las calles de Roma utilizando las februa para azotar a las mujeres que se cruzaran en su camino. Se creía que las mujeres azotadas se beneficiaban de mayor fertilidad y embarazos más sanos, así que muchas mujeres lo disfrutaban. Algunas incluso se acercaban y mostraban su piel para ser azotadas. La ubicación del azote era importante: por ejemplo, un azote en el pecho podía inducir a la lactancia.
También existía una actividad por la cual los nombres de jóvenes mujeres eran escritos y puestos en una jarra. Los hombres extraían los nombres al azar, y las mujeres así seleccionadas se entregaban carnalmente a esos hombres por el resto de la festividad. Esto se conocía como la «lotería del amor».
Lupercalia y San Valentín
El carácter violento, sexual, indecente y pagano de Lupercalia hizo que las autoridades cristianas la vieran con malos ojos. En el año 494, la Iglesia Católica bajo el mando del Papa Gelasio I prohibió la participación en el festival. Como era costumbre, los ritos paganos eran reemplazados por versiones cristianas. El mismo Papa instituyó la misma fecha del 14 de febrero como el Día de San Valentín, para honrar a ese mártir.
Excelente información!
Saludos, mi verdadero apellido es Lopez y según tengo entendido viene de Lope que a su vez viene de Lupu que como bien indica el articulo Lupu es lo mismo que decir «Lobo». Es curioso porque desde antes de saber todo esto he sentido atracción por los lobos, de hecho pienso (y por sueños he comprobado) que el espíritu del lobo es uno de mis tantos guías espirituales. Y aunque soy del signo Aries no me identifico mucho con ese signo porque contrario a lo que se dice yo soy una persona muy tranquila y pacifica. En lo que podría parecerme a mi signo es en que Aries lo rige el planeta Marte, cosa que no sabia tampoco pero Marte siempre ha despertado en mi toda clase de emociones y curiosidad. Gracias por este artículo.
Gracias a Lucifer por iluminar nuestro entender y saber cómo conducirnos.