¿Cómo pactar con Satán?

Pactar con Satán

El pacto con Satán, el Diablo o un demonio menor es un tema recurrente en el Satanismo y la imaginería religiosa. A través de un pacto, cualquier persona obtendría favores como juventud, belleza, dinero, fama, poder, conocimiento o lo que se quisiese, a cambio de su alma inmortal.

El primer pacto con Satán

La referencia más antigua a un pacto con Satán de la que se tiene conocimiento procede de un texto griego del siglo VI firmado por «Eutychianus». Este documento relata la historia de Teófilo, archidiácono de Adana, quien por humildad rechazó el cargo de obispo. El cargo fue entonces asignado a otra persona, quien imbuido con este poder lo utilizó para quitarle a Teófilo su posición de archidiácono. Arrepentido de su acto de humildad, Teófilo buscó a un hechicero para que a través de su intermedio le ayude a pactar con Satán. Satán entonces le exigió que renuncie a Cristo y a la Virgen María en un contrato firmado con su propia sangre, y a cambio le otorgaría el cargo de Obispo.

El pacto se cumplió tal como estaba esperado, pero años después Teófilo ya como Obispo comenzó a temer por el destino de su alma. Le rezó a la Virgen María y ayunó durante 40 días, luego de los cuales María apareció y le prometió interceder por él ante Dios. Teófilo ayunó durante 30 días más y luego María regresó, anunciándole que ha salvado su alma. Tres días después, Teófilo despertó en la mañana y encontró el pergamino del pacto sobre su pecho. Lo llevó ante el legítimo obispo y le confesó todo lo sucedido.

La historia tiene diversas variantes en reescrituras posteriores, pero siempre conserva su espíritu moralizante.

El pacto con Satán en el medioevo

Durante la Edad Media y el Renacimiento, los pactos con el Diablo eran considerados una realidad. Miles de personas sospechadas de pactar fueron acusadas de brujería, y subsecuentemente condenadas a muerte. Cualquier logro o rasgo sobresaliente de una persona podía ser visto como indicador de un trato con el maligno. Tanto una mujer demasiado bella como una mujer demasiado fea podían ser torturadas y condenadas a muerte por ser sospechadas de brujería.

Una de las obras que nos muestra más claramente las creencias imperantes durante la cacería de brujas del medioevo es el tratado Malleus Maleficarum (1486), también llamado El Martillo de las Brujas. El autor es Heinrich Kramer, un sacerdote católico alemán, cuyo propósito con esta obra era el de mostrar su perspectiva en brujería, refutar a quienes negaban su existencia y recomendar procedimientos para hallar y procesar brujas. En el libro, Kramer sostiene que todos los brujos han pactado con Satán, y que es más común que los que practican brujería sean mujeres que hombres. Mucho de lo que constituye el estereotipo moderno sobre brujas procede del Malleus Maleficarum.

Otra obra significativa que habla sobre los pactos con Satán es el Compendium Maleficarum (1608), una obra en latín de Francesco Maria Guazzo. Allí se distingue entre las dos formas de pacto, el expreso y el tácito:

El Pacto formado entre una bruja y el diablo puede ser expreso o tácito. El pacto expreso consiste en una solemne promesa de fidelidad y homenaje, hecho en presencia de testigos con el diablo visiblemente presente en forma corpórea. El pacto tácito involucra la ofrenda de una petición escrita al diablo, y puede ser hecha por un apoderado, a través de una bruja o un tercero, cuando la persona contratante tiene miedo de ver o hablar con el diablo.

El texto además describe los 11 pasos del pacto con Satán, incluyendo ilustraciones.

Nuevos fieles pactando con Satán. Ilustración del Compendium Maleficarum.
Nuevos fieles pactando con Satán. Ilustración del Compendium Maleficarum.

El Pacto de Urban Grandier

Uno de los pactos con Satán más notorios es el de Urbain Grandier, un sacerdote francés del siglo XVII, del cual se conserva el documento. A continuación se puede ver el texto original del pacto firmado por él y Satán, entre otros varios demonios. De izquierda a derecha y de arriba a abajo, las firmas son las de LuciferBelcebúSatán, Astaroth, Leviatán, Elimi y Baal Berit. 

Pacto con Satán
Pacto utilizado como evidencia durante el proceso contra Urbain Grandier.

Fausto y Mefistófeles, el pacto más famoso

Cuando se habla de pactos con el Diablo, la leyenda alemana de Fausto es de mención obligada. Se trata de la más conocida historia relativa al tema, inmortalizada en numerosas obras de arte, de las cuales la más célebre es probablemente el Fausto de Goethe.

Según cuenta la leyenda, Fausto es un erudito, decepcionado con su vida, quien pacta con Mefistófeles, representante del Diablo, para obtener conocimiento y poderes mágicos. El pacto dura cierta cantidad de años, al fin de los cuales Fausto debe entregar su alma. Fausto usa los dones dados por Mefistófeles para seducir a una inocente joven, cuya vida es destruida. Sin embargo, la muchacha es bondadosa, por lo que se salva y va al Cielo. En algunas versiones de la historia Fausto, arrepentido, también se salva, en otras termina siendo condenado al Infierno.

Lo que pocos saben es que Fausto fue una persona de carne y hueso, un hombre alemán llamado Johann Georg Faust, de profesión médico, hechicero y alquimista, de quien realmente se decía que había pactado con el Diablo a cambio de poderes sobrenaturales y conocimientos de toda clase.

El pacto con Satán en el Satanismo moderno

La inmensa difusión del tema y las diversas leyendas populares hacen que hoy en día todo el mundo conozca la idea de los pactos con el Diablo. Pero ¿cómo ven los satanistas a los Pactos? En la Biblia Satánica, Anton LaVey, padre del Satanismo simbólico o laveyano, expresa que el pacto con Satán no es más que una superchería ideada por el cristianismo para aterrorizar, y señala que, para un satanista, realizar un pacto con Satán es «innecesario». Para los satanistas laveyanos que deciden hacerlo, el pacto con Satán es simplemente un acto simbólico de adherencia a la filosofía satánica, o entendido como rito de iniciación.

En cambio, para los satanistas teístas, que consideran a Satán una entidad real, el Pacto es una manera de obtener favores como riquezas, poder y fama. Varios grimorios antiguos contienen las instrucciones para realizar los rituales que permiten pactar con Satán y otros demonios. Algunos de los más famosos son el Manual de Munich de Magia Demoníaca, el Gran Grimorio, el Grimorium Verum, el Libro de San Cipriano, La Llave de Salomón y La Llave Menor de Salomón.

3 comentarios en “¿Cómo pactar con Satán?”

  1. Yo hablé con un Satanista mayor por G+ y pregunto por qué no me hizo hacer el pacto con Satán. Hace más de 15 o más años, sabía lo que yo quería en ese momento y dejo o me alejo de ustedes. Busqué Iglesia de Satán en Google en Argentina no salía nada. Una vez que uno da el alma al diablo no la recupera más? Era justo el momento cuando estaba con los Illuminatis y ahora me buscan los Masones y no es lo que quiero. Este pacto lo debe hacer ustedes que saben. No voy a leer el Grimorio y hacerlo hay más personas involucradas aquí en este Pacto? Pregunto porque uno de sus altos jefes de la Ziglesis no quiso hacerlo! Qué pasó si ustedes están en Buenos Aires. Tampoco querían hacer los de Bahía Blanca, si sabían que quería riquezas Poder, y todo. Yo lo invocaba a Satán a mi manera, nadie me ayudó! Y nadie me contactó para hacer mi Pacto. Si están en Argentina, Buenos Aires, hagan contacto conmigo.

  2. Hola
    Soy de Chile y quisiera Pactar por favor solo por dinero. Ya que tengo muchas deudas que no me dejan dormir. Y andar con preocupaciones. Se que me ayudará demasiado. Y justificarlo atraves de juego de azar. Trabajo pero no alcanza para salir de todas mis deudas.

    Pd: me estafaron una vez los Illuminatis

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *